Alguien voló sobre el nido del cuco - Ken Kesey

Título: Alguien voló sobre el nido del cuco
Autor: Ken Kesey
Tipo: Novela contemporánea
Sinopsis:
Antes de que el LSD y las andanzas con los Alegres Bromistas (relatadas por Tom Wolfe en Ponche de ácido lisérgico) le convirtieran en uno de los personajes míticos del underground de los años sesenta, Ken Kesey ya había publicado Alguien voló sobre el nido del cuco, una auténtica «novela de culto». En 1960 Ken Kesey, estudiante universitario, se ofreció como voluntario para los experimentos sobre drogas psicodélicas que los psiquiatras de un hospital californiano ensayaban para futuros usos terapéuticos. De esta experiencia personal nació Alguien voló sobre el nido del cuco. Su protagonista, Randle McMurphy, que se finge loco para escapar a los rigores de la cárcel, es destinado a la sala del hospital psiquiátrico que dirige Ratched, la sádica Gran Enfermera. McMurphy, vital, generoso, amoral y rebelde, librará una guerra contra la Gran Enfermera. Las batallas serán divertidas y cruentas; algunos internos perderán en ellas la vida, y otros descubrirán los encantos del sexo, la bebida, la libertad y la rebelión permanentes.
País dónde sucede la trama: USA
Comentario:
Creo que este es sin lugar a dudas otro libro que vale la pena leer al menos una vez en la vida. Seas como seas, aprecies leer o no, te guste más un género u otro. Da igual. Esto es una historia de humanidad, de relaciones entre personas, de los problemas de las enfermedades mentales y de los problemas de los supuestos "cuerdos" cuando tratan a los locos. No es una historia interesante por el modo en qué está escrita, o por el tema en sí, sino por lo que te provoca. Es un libro que te hace pensar. Un libro que remueve algo dentro de ti y que hace que consigas buscar respuesta a por qué tantas veces disfrutamos haciendo daño a otros.

Me ha parecido muy interesante de principio a fin. En mi caso es una suerte que nunca haya visto la película, porque me acerqué al libro sabiendo un poco de qué iba, pero sin ideas preconcebidas, ni sensaciones. Simplemente, quería leerlo. Eso creo que me ha ayudado a disfrutarlo como es, sin pretensiones, y establecer ese tipo de diálogos en que estás todo el rato pensando, argumentando y criticando todo aquello que vas leyendo. No siempre disfruto de las lecturas así, pero opino que son necesarias a lo largo de la vida. Es más, creo que este tipo de libros deberían incluirse en el temario educativo, quizá durante el Bachillerato, para potenciar que las nuevas generaciones pienses y den sus propios argumentos sobre temas así.

Es un libro fino, no tiene una grandísima cantidad de hojas, ni tampoco párrafos largos o descripciones infinitas. Hay mucho diálogo, mucho humor, sarcasmo... y sobre todo hay humanidad. Los protagonistas, aunque son un elenco de un psiquiátrico, en algunas cosas están más cuerdos que muchos de fuera, y además, entienden diferentes visiones de la vida que me han parecido muy interesantes. Además, el protagonista principal, Randle, es un personaje clave en toda la obra. Su manera de comportarse, su modo de envolverse con el resto, de cambiar las cosas, tener su postura... me ha gustado mucho como alteraba todo el argumento e iba poco a poco, dando pasos. Creo que es una obra que vale descubrir. Ahora le tengo ganas a la película, a ver si me transmite aunque sea la mitad que el libro. Recomendadísimo.