Autora: Abbi Glines
Tipo: Juvenil romántica
Saga: The Vincent Boys #2
Sinopsis:
«Que un chico se enamore locamente de ti no es nada fácil. Sobre todo cuando ha estado enamorado de tu prima desde siempre.» Lana ha vivido toda la vida a la sombra de su prima Ashton, quien saca las mejores notas, tiene montones de amigos y físicamente parece una modelo. Y lo que Lana más ha envidiado: el amo r de Sawyer, de quien ella ha estado secretamente enamorada desde pequeña. Pero las cosas han cambiado: ahora que su prima y Sawyer han roto, Lana tiene la oportunidad de que él se percate de que existe.
Sawyer tiene el corazón roto. Ha perdido a su chica y a su mejor amigo. Pero entonces aparece Lana, la prima de Ashton, una muchacha tímida y dulce que ha pasado de niña… a mujer. ¡Y qué mujer! Sawyer no tiene claro si Lana va a poder curarle las heridas pero, quizá, si pasa tiempo con ella conseguirá poner celosa a su ex. Lo que empieza como un mero ligue se convierte en un atractivo juego de seducción. Sawyer y Lana tienen motivos diferentes para pasar tiempo juntos, pero sus encuentros acabarán por echar chispas… La mejor cura para el desamor es un romance apasionado.
Valoración: 6,5
Comentario:

Creo que este libro sería también en ese estilo: no es nada maravilloso, ni que haya que leer obligatoriamente, ni que te cambie la vida, pero es un libro que cumple todas las expectativas, está bien narrado, ameno, sencillo, personajes complejos y una historia realista. Que abundan muchos tópicos de este tipo de novelas, pues sí, pero es que no nos engañemos, cuando cogemos un libro de estos y más de una autora como Abbi Glines, creo que la mayoría ya sabemos dónde nos estamos metiendo, yo por ejemplo es el 11º que leo de ella.
No me extraña que Ash dejara a Saw y se fuera con Beau, porque es completamente diferente, es exactamente el tipo de amor pasional que cualquiera quiere, y no por ello creo que Beau la quiera menos o la respete menos.
En cuanto a Lana… bueno, es el tópico personaje marginado,
que siempre es la segunda en todo, con unos padres que sólo se hacen la vida
imposible sin importarle nunca su hija, ni lo que piense.
Una madre obsesionada con joder a su marido, avergonzada de que la dejara por una chica joven, enfadada con el mundo y con ella misma, y con el próposito de castigar a su ex quitándole el amor de su hija; y por el otro lado un padre que deja a su hija, se lleva fatal con su ex, su nueva mujer es sólo 3 años mayor que su hija, y realmente intenta que parezca que le importa, pero su hija y sus sentimientos se la soplan.
En ese contexto maravilloso, encima está Ash, la prima perfecta,
siempre guapa, con una familia perfecta, con dos chicos enamorados de ella,
amigos, colegio….
Y Lana nunca existe. Toda la vida enamorada de Saw, y cuando él por fin la ve, tiene que seguir siendo la segunda, en todo, y eso termina siendo frustrante y demasiado doloroso. Creo que la escena en que Saw compara lo que siente por ambas como si Ash fuera todo amor y pureza, y Lana fuera sólo deseo y vulgaridad, fue de lo peorcito que he tenido que leer. Pero también ha sido algo muy logrado, al igual que las peleas y la carta que escribe ella al despedirse, y que luego le contesta Saw.
Una madre obsesionada con joder a su marido, avergonzada de que la dejara por una chica joven, enfadada con el mundo y con ella misma, y con el próposito de castigar a su ex quitándole el amor de su hija; y por el otro lado un padre que deja a su hija, se lleva fatal con su ex, su nueva mujer es sólo 3 años mayor que su hija, y realmente intenta que parezca que le importa, pero su hija y sus sentimientos se la soplan.
Y Lana nunca existe. Toda la vida enamorada de Saw, y cuando él por fin la ve, tiene que seguir siendo la segunda, en todo, y eso termina siendo frustrante y demasiado doloroso. Creo que la escena en que Saw compara lo que siente por ambas como si Ash fuera todo amor y pureza, y Lana fuera sólo deseo y vulgaridad, fue de lo peorcito que he tenido que leer. Pero también ha sido algo muy logrado, al igual que las peleas y la carta que escribe ella al despedirse, y que luego le contesta Saw.