Ochenta melodías de pasión en amarillo

Título: Ochenta melodías de pasión en amarillo
Autora: Vina Jackson
Tipo: Novela erótica
Sinopsis:

Tras la pérdida accidental de su violín, Summer acepta la proposición de un extraño llamado Dominik que se ofrece a regalarle un valiosísimo violín si ella toca en privado para él. La atracción entre los dos es inmediata y su intensa conexión los llevará a explorar sus deseos más inconfesables.
80 Melodías de Pasión comienza con Amarillo y le siguen Azul y Rojo. Tres novelas protagonizadas por Summer, una violinista con mucho talento que mantiene una tormentosa relación con Dominik, un adinerado académico.

Valoración: 5
Comentario:
Sinceramente esta saga no me está gustando. Me he leído este y también he acabado el segundo, que reseñaré mañana, y no sé por dónde pillarlo. No me gustan los personajes, le estoy cogiendo manía a Dominik, Víctor es un hijo de puta desgraciado, la otra es más rara que un perro verde... no sé, además todo esto de la dominación, las cuerdas, los golpes, te quiero, no te quiero, somos pareja, no lo somos... a la par que la cosa de la música, el cuarteto, el violín y su carrera, cómo que no.

La verdad es que he leído muy buenas críticas de él, muchas basadas en que "me gustó más que Grey" joder, vaya límites se pone la gente, es MUY difícil que cualquier libro no guste más que el de Grey, porque vamos... no da para más el pobre. En este caso no hay esa gran diferencia entre el amo dominante ricachón y tal que seduce a la chica incauta, para nada, son dos personas adultas que aceptan su sexualidad, ok, pero a mí me cansan. Encuentro que hay demasiadas incongruencias, que no se aclaran el uno con el otro... y bueno sí, cierto, que a mí el BDSM no me gusta nada y me pongo mala solo de oír a los tios cuando se ponen en plan mandones haciendo el idiota. Es que no puedo dejar de pensar en mí misma, y claro, os aseguro que si algún día un hombre intenta "dominarme" saldrá escaldado, eso os lo aseguro.

Lo que también echo en falta en este libro es amor. Ellos se hablan y se ven como si fueran dos amigos con derechos cosa que creo que nunca entenderé aunque con el paso de los días sí que van sintiendo cosas, (sobre todo en el segundo libro) pero parece que no quieren reconocerlo.... y así les va luego, con toda esa mierda, los jueguecitos, las terceras personas... Ahora que si Dominik me ponía mala a veces, Viktor con sus mierdas en Nueva York y esa gilipollez de que hay mujeres que nacen para ser sumisas, tatuadas y vendidas a un amo que las controle es que me dan ganas de gritarle y pegarle hasta que me duelan los nudillos. ¡PERO QUE MIERDA! Como si las mujeres fuéramos ganado o algo así para que nos marquen y nos traten como a objetos sin derechos, sin capacidad de decidir ni de actuar... ¿de qué vas? Ahora que claro, él es un hijo de puta misógeno y machista, pero las mujeres que lo permiten... son mucho peores. Lo siento, pero ese tipo de trato es humillante, denigrante y ofensivo y no creo que nunca pueda llegar a respetarlo, no puedo.