En busca del highlander

Título: En busca del highlander
Autor: Kinley McGregor
Tipo: Novela romántica histórica
Saga: McCallister #2
Sinopsis:
Se dice que Braden MacAllister, barón inglés y orgulloso guerrero de las Highlands, puede hacer caer a un enemigo con un simple golpe, y a una mujer con un solo beso. Parece ser que con Maggie el barón no puede, puesto que la hermosa pelirroja, decidida a acabar con las largas contiendas que siguenm desarrollándose violenta mente entre los clanes y su enemigo común, es inmune a sus intentos. Braden sólo lo detendrá cuando la encuentre sola y la suavice con sus apasionadas caricias y sus irresistibles besos. Pero no importa cómo se estremezca bajo el sensual toque de Braden, pues Maggie no debe rendirse porque mientras esta disputa continúe, la vida de sus hermanos seguirá en peligro
Comentario:

Pues ala… aquí tenemos la historia de un loco y afanado conquistador, y como pasará de revolcarse en la cama de todas las mujeres y quererlas a todas, jamás contentándose con una, a enamorarse perdidamente y ser fiel. Ardo en deseos de ver el cambio jajaaj

Porque nos gustan los highlanders, razon 3.

Pues la verdad es que es muy buena estrategia que todas las mujeres, tanto de un clan como del otro, se planten para que se terminen la guerra y obligarles a firmar la paz.  Entiendo que la mitad de las veces las tonterías entre hombres, con ese honor suyo que no sé de qué les sirve, ponen en peligro a todo el mundo, incluidas las mujeres y los niños, por no hablar de enfermedades y hambre. Así que bueno, Maggie es la que lleva las riendas y el apuesto de Braden el que tiene que seducirla para que cejen en su empeño de quedarse ahí y obligarles a claudicar, esto va a ser interesante. Ah, y el rollo de ‘mi amor’ yo le daba de palos con esas confianzas, por mucho que te guste oírlo de esos labios perfectos.

“Le encantaba una buena caza” si hijo, como si fuera un cordero. Y me parece horrible que los hombres den palizas a sus mujeres para que vuelvan a casa y las traten como un trapo de su propiedad, además, de que Loch y sus hermanos no entiendan por qué ellas hacen eso, y critiquen esa decisión a la ligera como si fuera un juego o un capricho.

Se veía venir que Maggie estaba enamorada de él desde pequeña. Años y años intentando que la mirara, años buscando una sonrisa, buscando siquiera que la viera, que le dijera algo, bizcochos, tartas, perfumes, vestidos… y nada, ni siquiera una conversación. Y ahora, viene con ínfulas a tratarla bien como si estuviera encaprichado dulcemente de ella, como si fuera tonta. Esta historia me va a gustar.

Porque nos gustan los highlanders, razón 4.

Ohhhh la historia del caballo, con su hermano y con Braden cuidándola así es tan mona, no me extraña que se pasara su infancia enamorada de él queriendo ser su esposa. En serio, no entiendo toda esta mierda de la fidelidad y el “pides demasiado a un hombre, así te quedarás sola”. Perfecto, o sea, una mujer tiene que ser fiel, madre y ama de casa, perfecta e impoluta, jamás deshonrando a su marido y siempre permitiéndole entrar en su lecho, además de hacer la vista gorda y entender que él tenga a otras. Pero, ellos no pueden ser fieles, porque “es su naturaleza”. Eso es mierda, eso es lo que es. Cuando quieres a alguien, las ganas de estar con otra persona se esfuman… y si no se esfuman, no lo quieres tanto, ¡qué coño!

Me encanta el modo en que Sin “ayuda” a Maggie y cómo ella se le declara, diciendo cuál es su color preferido, su comida preferida, lo que le gusta, y para terminar el reconocer que lleva toda su vida enamorada de él. Cosa que él no espera, no entiende y tarda en procesar. Al igual que entiendo el modo en que ella se deja llevar y se entrega a él –de primera mano sé lo que se siente con eso, y la necesidad de hacerlo aunque se convierta sólo en un recuerdo-.

Y el final, con el bastardo –que no es suyo-, como tanto el enemigo como él se dan cuenta de que aman a sus mujeres y entran en razón, se firma la paz y se prometen. Fantástico. Una pena que esto sólo sea una novela. 

LO PUTO MEJOR DE LA LIFE!
Adoro a Braden.