Autor: Antonio Teruel Fernández
Tipo: Novela histórica
Sinopsis:
Siglo II a. C. Con Cartago debilitada e impotente tras la Segunda Guerra Púnica, las legiones romanas extienden de forma implacable el poder de la ciudad del Tíber en el Mediterráneo. Como un producto más de la conquista y la expansión, los latifundios de Italia y la propia Roma sustentan su economía sobre los hombros d e cientos de miles de esclavos, mercancía humana traída desde todos los puntos del mundo conocido y que no tiene más valor que el que sus amos le quieran otorgar.En este cosmos de violencia y dolor, Lubbo es arrancado de su hogar en la Celtiberia, comprado por un senador romano y enviado a una explotación agrícola en Campania, donde sobrevive durante siete años hasta que el destino hace que se vea convertido en guardaespaldas personal de su señor. Odio, sufrimiento, amor y venganza van marcando la vida del joven protagonista en esta historia en la que hechos y personajes enlazan de forma paralela con determinados momentos de la conquista de Hispania y en la que, directa o indirectamente, hacen acto de presencia personajes como Sulpicio Galba, Catón o Escipión Emiliano. Con una acción que no decae nunca, el lector se traslada de forma vívida a una Roma deslumbrante pero, al mismo tiempo, oscura, cruel y corrupta.
Comentario:
Cuando conseguí completar el reto de novela histórica me sentí muy contenta conmigo misma, porque aunque es un tipo de libro que me gusta leer, a veces me meto tanto en la romántica histórica que me olvido de la histórica real. Así que siempre me viene bien, y en casa tenemos un montón de libros de éste tipo porque son los preferidos de mi madre. De entre todos los que se sorteaban a los que completamos el reto, ésta era mi segunda opción, así que estoy muy contenta y espero que me guste.
La época romana siempre ha sido una de mis preferidas para leer novela. Yo soy más griega y egipcia de pensamiento y amor, pero es verdad que las novelas o series ambientadas aquí siempre me han gustado. Además, sólo con imaginar el poder pasear por la Roma de aquellos años, en pleno auge, me emociono.
La historia de Lubbo no es una historia fácil, ya en la sinopsis te lo dicen, y en los primeros capítulos empiezas a ver qué tipo de vida lleva. Cuando se enfrenta a sus superiores, por llamarlos de algún modo, me recordó a Espartaco y toda esa parafernalia, no cómo gladiador, obviamente, sino como esclavo. Y luego, cuando cree que ser el “puto” –porque por muy bonito que lo pongas, es lo que es- de la domina se piensa que podrá conseguir algo más, me entraron ganas de darle un abrazo y darle una torta al mismo tiempo. Valeria, la domina, se comporta como una perra sin corazón durante todo el libro. Altanera, borde, celosa… y termina siendo un verdadero dolor para Lubbo, en todos los sentidos, haciéndole daño cada vez que puede. El padre, en cambio, es un borracho libidinoso que no tiene mucha cabeza pero que no disfruta haciéndole daño a sus esclavos, ni a nadie, simplemente tiene una vida bastante patética y se dedica a vivirla.
En pocas palabras: es una tragedia, porque para ser un drama debería terminar bien, pero no lo hace precisamente. Aunque cuando terminan en Hispania y Lubbo dice “Aquí empieza todo” da la sensación de que el autor tiene intención de continuar la historia del esclavo celtíbero, que ya ha pasado por mucho en su tiempo en Roma. El libro no está mal, como novela histórica que es, toda esa parte de Roma, hechos, fechas y datos está genial, pero me ha faltado algo diferencial que me hiciera amar al personaje.
Hola :) La verdad que esta no me consigue llamar, quizás soy más como tu, de la egipcia y sobre todo la Griega; aunque últimamente el tema nórdico también me esta llamando mucho. Gracias por darmela a conocer, un besin^^
ResponderEliminarCreo que ahora no me apetece ponerme con una novela así, pero agradezco la reseña.
ResponderEliminarBesos!
Hola guapa,
ResponderEliminarCreo que lo voy a dejar pasar, no me llama mucho y tengo demasiadas lecturas pendientes.
Besos
Hola Neus no conocía la novela ni el autor pero por el momento no entra en mis planes de lectura, gracias por la reseña.
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