Autor: Valerio Massimo Manfredi
Tipo: Novela histórica
Sinopsis:
La recia disciplina de Esparta y sus leyes familiares alimentan esta leyenda que lleva al lector por el interior de aquella civilización y su guerra contra el imperio persa. El destino de dos hermanos separados desde pequeños y las sorprendentes vueltas del destino son algunos de los ingredientes de esta obra histórica y épica.
Comentario:
Me ha sorprendido muy gratamente esta historia. Iba con ganas, ya que Manfredi me encanta, pero al ver como aparecía Leónidas y las Termópilas, he terminado rendida a sus pies. Me encanta esa tragedia histórica que aconteció a los griegos, dónde 300 hombres se sacrificaron para salvar Grecia y su democracia, su cultura y sus costumbres. Sé que es una manera romántica de verlo, pero yo no lo puedo remediar, es algo a lo que le tengo cariño y admiración desde siempre. Si a eso le sumas lo increíblemente bien que escribe el señor Manfredi y lo interesante que es la historia del protagonista, pues tienes un libro que es una maravilla. Recomendado a todos los amantes de la histórica, sobre todo si os gusta la Grecia clásica y estáis sedientos de más historias de esa época, con la épica por protagonista y los hombres luchando por su mundo. Para los que os gusta la histórica, pero sois más de Templarios e Inquisición, o tiráis más hacia la IIGM y así, pues entonces no sé si os enamorará, pero estoy casi segura de que al menos si os gustará.
CUIDADO SPOILERS!
"—Para ti no habrá más peligros, Efialtes, aquí se termina tu viaje.
—¿Cómo sabes mi nombre, quién eres? —balbuceó el desgraciado sintiéndose perdido—. Eres espartano...
—No —repuso el hombre con tono sombrío, se echó la capa detrás de los hombros desmesurados y tendió hacia él dos manos que parecían garras de oso.
—Entonces... ¿Por qué...? —dijo Efialtes, asombrado, mientras las manos se cerraban alrededor de su cuello.
Su rostro se tornó morado, los ojos se le saltaron de las órbitas. Trató de liberarse con un último coletazo de vitalidad y luego se desplomó inerte en el charco de orina que su cuerpo había expulsado con el espasmo de la agonía.
Así murió Efialtes, hijo de Euridemo, traidor de Leónidas en las Termópilas, a manos de un desconocido."
Es la historia de la crueldad del mundo, y de la propia gente. Talos, al nacer con un defecto físico, es abandonado en el Taigeto por su padre, ya que la ley Espartana así lo quería. Crece y vive con los hilotas como si fueran su mundo, y tras luchar en las Termópilas de la mano de su hermano Brito, y su padre, a quien no conoce, y verlos morir a ambos, entonces conoce la verdad, en la que no quiere pensar. ¿Por qué debería amar a un pueblo y una tierra que no lo quiso, y dejar a los que lo cuidaron, criaron y amaron sin pedir nada, sin juzgarle? Es muy duro y te hace pensar. Las leyes Espartanas eran terriblemente inflexibles, pero eso también hacía que fuera un pueblo totalmente diferente al resto de regiones griegas.
"Llevo el escudo y la armadura de los Cleoménidas, una de las familias más nobles de Esparta, pero ya no sé quién soy. Añoro cuanto he dejado pero no puedo volver atrás y ante mí no veo nada. Brito murió en Platea, recuperó el honor pero perdió la vida. El rey Pausanias, que ahora ocupa esta isla, me entregó las armas de mi hermano y me reveló mi verdadero nombre: Cleidemo. Volví a la casa en la que había nacido y me encontré con la mujer que me había parido, con mi madre Ismene. Jamás olvidaré aquella noche, aunque viviera mil años; el corazón se me había endurecido como una piedra de solo pensar en la que había tenido el coraje de abandonar a su propio hijo a los lobos de la montaña. Saboreaba casi el placer de torturarla, de hacerle sufrir, a ella, la esposa altiva de Aristarcos. Pero me encontré ante una criatura quebrada, con el rostro cavado por las lágrimas y una mente que vacilaba al borde de la locura. Cuando la estreché contra mí y le prometí que jamás la abandonaría su corazón no soportó la emoción... y murió en mis brazos..."
Sigue la historia de Talos, cuando se conoce a sí mismo, cuando empieza a vivir con su nuevo nombre y da sentido a la profecía que le hicieron cuando era joven. Esparta cambia, los griegos cambian, y todo en medio de una época muy jodida con Persia luchando por invadir toda Grecia, y muchos hombres traicionando a su mundo y su pueblo por dinero o por poder. Una pena, pero eso siempre ha sucedido. Talos, en cambio, es el típico personaje y protagonista ejemplar, que nunca se vendería, que es honorable por encima de todo. Y eso te hace quererlo, igual que su historia te llena totalmente y quieres más.
"Leónidas, hijo de Anaxándrides, rey de los espartanos, conductor panhelénico, al rey Leotíquidas, a los honorables Éforos y a los venerables Ancianos, salve.
Cuando leáis estas palabras habré abandonado el mundo de los vivos y conmigo estarán los valientes hijos de Esparta que opusieron su pecho a la fuerza inmensa de los bárbaros. Es justo, pues, que quien pagó con su propia sangre haga oír su voz. Con este, mi último acto, he querido salvar de la destrucción a una gran familia de valientes e impedir que fueran sacrificados injustamente. Son Brito y Cleidemo, hijos de Aristarcos; Cleoménidas, el primero, destinado a morir en contra de la ley de la ciudad, y el otro, que vive en condición de siervo, huido de la muerte que desde tiempo le había sido reservada según las leyes de la ciudad. Ambos son la viva imagen de la condición de Esparta, pues entre estos peñascos vierten su sangre tanto ilotas como guerreros. A estos dos hijos de Esparta debe revelarse la estirpe común y es mi deseo que sobre ellos se funde un nuevo orden para que dos estirpes que viven eh la misma tierra, y que por ella dan su sangre en igual grado, en el futuro vivan en paz bajo la misma ley. A vosotros os pido que se rescate la memoria de mi hermano Cleomenes, vuestro rey, empujado a las tinieblas de la locura y la muerte no por mano divina, como yo creo, sino por mano humana. Si todo esto no ocurriera, sobre la ciudad por la que me dispongo a dar mi sangre caerá un día la maldición de los dioses por la rabia de quien un día padeció la injusticia y el atropello, si es verdad que a quien se dispone a morir los númenes envían verídicas premoniciones."
Un libro precioso, fácil de leer, muy intenso y con muchas emociones que te hacen plantearte cosas realmente importantes: como la familia, los hijos biológicos o adptados, el honor, el destino, el amor; y bueno, a su vez un resumen de una época histórica convulsa y llena de problemas, dónde se relata de una manera fácil todo lo relacionado con Esparta y Jerjes, la batalla de las Termópilas, Platea y de más. Sinceramente: muy recomendado. Me ha gustado muchísimo.
Hola Neus me anoto tu recomendación que me apetece volver a leer algo de Manfredi, y un libro único y espartanos, pues me has convencido. Gracias por la reseña.
ResponderEliminarTe estas haciendo una buena maraton de Manfredi :P
ResponderEliminarSaludos
Un autor al que tengo debilidad.
ResponderEliminarPerdón el spoiler( si aún no lo han leído STOP!!!!). Pero de verdad quiero entender si Talos fallecé al final. Por favor me intriga la idea
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