27 de febrero de 2014

Reflexiones Novelas eróticas - BDSM

Bueno, mi querida -léase con mucha ironia- trilogía de 50 sombras de Grey ha abierto muchísimo el mercado de la novela erótica, que hasta hace nada quedaba como muy escondido. Además, con esa especie de mini-intrusión en el mundo de la dominación y el sadomaso se ha abierto la veda para que chorropotocientas mil sagas aparezcan sobre eso. Creo que he leído las suficientes como para poder hacer esta entrada y esta espcie de "reflexión", con la que no pretendo hacer nada más que expresar una opinión y un cúmulo de conclusiones que me han venido a la cabeza.

En primer lugar, no soy una mega experta en el mundo del BDSM, supongo que sobre todo porque no es un mundo que quiera para mí. Pero siempre he considerado que para poder hablar de cualquier cosa hay que informarse mínimamente, y el saber no ocupa lugar. Empecemos por el principio, la dominación y el sadomasoquismo, con todas sus vertientes y posibilidades, pueden ser meras fantasías, juegos para salir de la rutina o un modo de vida elegido. En general, en los libros que se han puesto de moda, el protagonista es un amo dominante que quiere una sumisa en plan 24/7, es decir, 24h al día, 7 días a la semana. No estamos hablando de una fantasía o un juego sexual en pareja, estamos hablando de un concepto de relación, de vida y de pensamiento. Por eso mismo, la mayoría de libros que he leído no son realistas en cuanto a la manera de hablar sobre el personaje masculino dominante.

Pongamos de ejemplo a Grey. En esa novela parece que la mierda que ha tenido que soportar Grey en su infancia es lo que le hace ser tan dominante, borde y a veces duro, además de la rara predilección que tiene por golpear a sus parejas, además de que tengan que ser sumisas, claro. Si analizamos esto nos damos cuenta de que no tiene ningún sentido en el mundo BDSM. Un amo dominante no es un enfermo, ni responde a ese tipo de vida por su pasado -o eso te dicen, porque sinceramente a mí que a mi pareja le ponga causarme dolor sí que le encuentro cierto rasgo de anormalidad-; la dominación es una elección. Tú con total libertad elijes ese modo de vida y punto. No hay ningún pasado de mierda, ni dolores, ni nada por el estilo. Además, en general, los dominantes no tienen esa especie de doble personalidad de Grey que tan harta me tiene, que lo hace ser al mismo tiempo un amo dominante muy duro y dos páginas más allá el típico amante pesado con rasgos de pastelosidad extremos.

Leyendo no hace mucho sobre esto, llegué a uno de esos blogs de spankers que ahora parece que han brotado a miles por la red. Llegué a él después de leer una reseña de un libro de estos, porque la autora decía lo mismo que yo, que sí querías BDSM fueras a lo que hay de verdad y vieras la dureza de la realidad. Sinceramente... se pasa mal, al menos yo. Me ponía negra leer según que cosas, y joder, había un vídeo en el que se veía como le ponían "el culo rojo" -que tanta gracia parece haceros últimamente- a una chica en la vida real, sin peros, primero con la mano, luego con la parte plana de un cepillo y por último con un cinturón. Dios, aún me parece oír los gritos. ¿De verdad eso puede llegar a gustarle a alguien? Sinceramente, no entiendo como una persona puede disfrutar haciéndolo... ahora que aún menos entiendo al que se presta a ello y deja que se lo hagan. El dolor es una sensación muy fuerte, cierto, pero no puedo soportar la idea de infringírselo de manera directa a alguien a quien quiero, y mucho menos disfrutarlo. Por el amor de dios, si ya el mero hecho de arañarle la espalda a mi chico, en ese momento en que no puedes remediarlo, me hace sentir mal y culpable, ¿pegarle? Jamás.

Pero bueno... yo lo único que quería dejar claro es que una cosa es la literatura erótica y las fantasías, y otra muy diferente es la realidad. Puede que te guste fantasear con unos azotes o que la típica fantasía de ser "mala" y que él te castigue, pueda gustarte. Ahora bien, en la realidad una palmada dada con fuerza en cualquier parte del cuerpo duele, y un golpe con un cinturón ni te cuento. Dejar enrojecidas las nalgas a base de golpes no es algo que sea placentero, no al menos para mí, y a aquellos que disfruten con el dolor, pues bueno... no diré lo de "haceróslo mirar" porque está mal visto, pero sinceramente, es duro llegar a pensar que alguien disfrute de algo así.

Una vez llegados a este punto... una de las cosas que me ha hecho escribir esta entrada, ha sido la reseña de una blogguera sobre 50 sombras de Grey. A cada uno le puede gustar lo que quiera, los que me conocéis ya sabéis lo que pienso sobre esa trilogía, pero vengo aquí a comentar algo que me ha dejado, lo mínimo, estupefacta. En esa reseña, que no recuerdo cual ha sido -quizá debería haber copiado el link, mea culpa- la chica en cuestión decía lo siguiente: "Cuando dicen que todas las mujeres deberíamos leer este libro, no estoy de acuerdo, ¡son los hombres los que deberían leerlo! Leerlo a conciencia y hacer el 90% de cosas que salen en este libro, y así nos iría mucho mejor".

Sinceramente, ¿vamos a basar el ideal de seductor y de pareja masculina en Christian Grey? ¿De verdad? No sé si perder ya toda la fe en la humanidad que tenía, o echarme las manos a la cabeza con mi generación. Por el amor de dios, tengo 21 años, y os puedo asegurar que un gilipollas como Grey no se acerca a mi ideal de tio ni a la de 832738179. No digo que os tenga que molar Edward -aunque se parece un poco más a mi modo de ver la vida- pero joder, ¿en serio Grey? Estoy hasta las mismas narices de leer libros de tios autoritarios, dominantes, posesivos como machos cabríos y celosos como locos. ¿Eso es sexy, es interesante en un hombre? Por el amor de dios. Si queréis leer novelas eróticas buenas y os va la marcha, por decirlo de algún modo, leed Sweet de Maya Banks. Ese Grey, Damon y Micah son duros... y el sexto libro, con dos amos dominantes de verdad, ni te cuento. No son mi ideal de hombre, pero al menos son más realistas. Y si de verdad os gusta ese mundo, entrad en cualquier chat de sexo y meteros en la sala de sexo duro o en la mazmorra, cuando os humillen y os traten como perras, entonces, recordad al meloso de Grey y daros cuenta de que generalmente las cosas no suelen ser tan "bonitas" como en los libros.

Digamos que hay dos tipos de dominantes, por así decirlo. Están los dominantes como los de la saga Sweet, que tienen mucho carácter, quieren todo el control y lo tienen todo pensado, les va el sexo duro y las fantasías, pero no disfruta humillando ni haciéndole daño a su pareja. Sí que hay azotes y cosas así, pero no por castigo, sino porque a ambos les guste. No lo quiero para mí, pero lo entiendo un poco más.
Y luego está el otro amo dominante, como el que sale por ejemplo en 'la sumisa insumisa', un controlador, posesivo y temperamental que disfruta de los castigos, los golpes, la humillación, los insultos... todo gira en torno a él, y su concepción del rol amo-sumisa. La descripción que hace en ese mismo libro de porqué le gusta "pegarle" a mí me resultó... os lo podéis imaginar.

Para mí.. no existe un ideal de hombre general, pero os puedo asegurar que mi chico es exactamente el tipo de hombre que quiero para mí y para cualquier chica que me importe. No creo que Sergio llegue a leer nunca esto, tampoco es que me avergüence, pero... bueno, dejémoslo en que supongo que no lo leerá. Para mí el chico ideal es como él. Un chico seguro de sí mismo, divertido, atento, a veces arrogante pero sin pasarse, un poco orgulloso, preguntón, lo suficientemente listo como para entenderlo todo pero saber hacerse de rogar cuando toca. Sensible, educado, caballeroso, cariñoso. No es celoso, ni posesivo, ni tampoco es dominante, sólo es... él mismo, a veces se preocupa un poco porque te quiere y porque él te ve perfecta y no quiere compartirte con nadie. A sus ojos eres preciosa, siempre te hace sentir segura con tu cuerpo, jamás te haría daño, ni física, ni emocionalmente, al menos no queriendo. Es humano, se equivoca, pero sabe pedir perdón y estará ahí cuando lo necesites. En la cama es... todo lo que un hombre debería ser. Es dulce, es intenso, a veces lleva las riendas y a veces deja que tú mandes, tiene imaginación y sabe cómo volverte loca. Es capaz de tener el sexo más vainilla del mundo y a la vez el sexo más rudo que haya, pero siempre estará ahí para ti, abrazándote y susurrando un 'te quiero' cuando mire tus ojos. No es más, ni menos que tú, es tu igual, tu pareja. Podría continuar... pero en verdad sería más fácil que os presentara a Sergio, aunque no serviría de mucho, porque no hay dos como él. Seguramente habrá chicos de su estilo, pero nadie como él.

En mi mundo... bajo mi punto de vista, un chico no debe leer ningún libro para parecerse a este u a otro personaje de libro. Él es real. Lo único que debe hacer un hombre es ser sincero, respetuoso y él mismo. Bajo mi punto de vista los hombres perfectos son aquellos que saben combinar la dulzura y la dureza en los puntos exactos, aquellos que siempre te hacen sentir bien incluso cuando estás siendo demasiado traviesa... o demasiado ingenua. El chico que es capaz de entender la ternura de un beso suave tras un día duro, dónde solo quieres que te abracen; y que también sabe entender el brillo en unos ojos para huir al primer lugar a solas que pilléis y hacerlo sin demora contra una pared.

No quiero ningún Grey en mi vida, me quedo con Sergio.

5 comentarios:

  1. Estoy totalmente de acuerdo contigo, las niñas que pierden las bragas x Mr. Grey me parece que sinceramente no tienen ni idea de como son los verdaderos "amos/dominantes"
    a mi no me va ese rollo, pero pienso que a veces hay que ser un poco travies@s... Ya me entiendes... Jajajaja
    digamos por seguir con tu última frase que yo tampoco quiero un Grey en mi vida, encontré a mi "soulmate" (alma gemela en alemán), al que hace 24 años sus padres llamaron David. Jeje
    Besitos guapa!!
    Pd: a ver cuando nos presentas a Sergio!! =)

    ResponderEliminar
  2. me quito el sombrero, tú sabes lo que es tener a tu lado a un hombre de verdad

    ResponderEliminar
  3. perdón, la pamela, las señoritas nos quitamos la pamela, un saludo y cuida mucho a Sergio

    ResponderEliminar
  4. Cada quien, con su punto de vista. Yo he leido todas estas historias que incluyen el DS y respeto su estilo aunque no sea el mio. Por nombrar otra saga como amos y mazmorras de lena valentin!

    ResponderEliminar
  5. Aunque no es mi estilo, yo respeto la libertad de cada uno de vivir su sexualidad como mejor le parezca y concuerdo en que hay novelas de este género (BDSM) muy buenas, entre ellas la Saga Maestros de Shadowlands de Cherise Sinclair.

    ResponderEliminar