Autor: Lisa Kleypas
Tipo: Novela romántica histórica
Sinopsis:
Cuando le dijeron que su esposo había muerto, la vida de Lara se convirtió en un caos. Hunter, conde de Hawksworth, había naufragado en alta mar, dando fin así a su desdichado matrimonio, carente de ternura y pasión. Pero ahora Lara tenía frente a sí a un hombre que exponía secretos que sólo un marido podía conocer y que j uraba que ella volvería a ser su esposa. Se parecía a Hunter, pero era amable y afectuoso ¿Acaso se trataba de un astuto desconocido que intentaba engañarla?
Comentario:
Ya leí un libro similar, creo recordar que de Sylvia Day, y debo decir que lo encuentro un tema argumental interesante. Una mujer que queda viuda de un hombre que jamás la quiso, ni la cuidó, ni la sedujo… que vuelve a casa, y ha cambiado. Ahora quiere conocerla, quiere amarla, seducirla, y convertirla en una esposa de verdad, no de puertas para afuera, ni nada parecido, sino que sea su amiga, amante y confidente para todo. Y claro, para alguien como ella, tan tímida, dolida y preocupada, además de ingenua, es difícil luchar con todos esos cambios y aceptar. Eso sí, no entiendo como una mujer puede elegir libremente casarse con alguien a quien le es indiferente y dejarle el camino libre para tener amantes, porque ella no lo quiere en su cama. Lo veo absurdo de todos modos. Además, odio cuando las mujeres hablan de sexo como si fuera algo masculino, una especie de deseo bajo y banal que tienen que satisfacer los hombres. Entiendo que es la época y tal, pero es que lo peor es que hoy en día todavía tienes que oír semejantes argumentos absurdos en más de una ocasión. Y es en sí machista y a la vez absurdo, además de que tampoco es que sea un cumplido para los hombres.
No soy capaz… me enamoro de los personajes y me dan mucha pena. No entiendo como puede ser tan despegada esta chica, con un hombre así, si es que te sale del alma acercarte y dejarte seducir. Que sí, que es cierto, que él se portó fatal con ella al principio y ahora tiene reticencias, pero igualmente… creo que me costaría muchísimo ser tan despegada de alguien como Hunter. SI es que tiene bonito hasta el nombre.
Oh dios… “yo lo amo, trataré de ser mejor esposa” claro que sí, muchacha, muy bien. El tío le da al juego y la bebida, luego llega a casa te pega y te deja cardenales por medio cuerpo, pero la culpa es tuya por no ser una buena esposa. Así vamos bien. Y cuando tu hermana intenta ayudar, tú encima lo justificas. La gracia de todo esto, si es que la tiene, es que esto es el siglo XIX, y ahora 200 años después, sigue pasando lo mismo. Maravilloso, se nota lo mucho que hemos evolucionado.
“-Lonsdale siempre me ha resultado agradable -señaló Janet-. Además, si es cierto que pegó a Rachel, tal vez fue porque ella se lo merecía.
Lara negó con la cabeza, al tiempo que la miraba fijamente.
-Tener que oír un comentario así de otra mujer...”
Siempre tiene su parte tierna cuando ponen a un peque como personaje, y aquí Johnny es un niño encantador. Estoy completamente de acuerdo con Lara al decir que tener un padre ladrón no hace que el niño lo sea, ya que si se cría en un ambiente decente el niño lo será también. Eso sí, también estoy de acuerdo con Hunter en que no puede ir trayendo huérfanos a casa como si nada, porque ellos están más o menos bien económicamente, pero tampoco tanto.
No me gusta el modo en que Hunter intenta convencer a Lara de tener relaciones, siempre usándolo como moneda de cambio. En parte lo entiendo, porque ella es ofuscada y cabezona como ninguna, siempre negándolo todo cuando sabe que se siente atraída por él, pero también es un tanto en su contra. Usarlo como moneda lo hace ser menos importante o intenso, menos real, es como si fuera mercancía, como si le estuviera reclamando algo. No es nada romántico, ni pasional, y creo que eso es precisamente lo que necesita Lara para aceptarlo, volver a ser aquella joven idealista que soñaba con un marido que la amara y la sedujera cada noche.
Amor en estado puro:
“-Jamás me cansaría de mirarte -confesó con voz ronca-. De contemplar tus hermosos ojos verdes, la dulzura de tu rostro. -La miró con una necesidad tan pura que ella sintió que el fuego de sus ojos la quemaba-. Lara, hay algo que quiero que comprendas. Estos últimos meses contigo..., el tiempo que hemos compartido... Vale la pena morir por ello. Si ese recuerdo es lo único que puedo tener, me basta. No me importa lo que digas mañana, o lo que pueda sucederme de aquí en adelante”
Realmente es un libro precioso. Es predecible, todo sea dicho, pero es que a veces las historias más bonitas, románticas e interesantes son predecibles, y ello no tiene nada de malo. Lo recomiendo totalmente.