La cueva de cristal

Título: La cueva de cristal
Autor: Lisa Kleypas
Tipo: Novela romántica contemporánea
Saga: Friday Harbor #4
Sinopsis:
Justine Hoffman ha construido su vida basándose en la seguridad. Es propietaria de un hotel y, aunque disfruta de una vida cómoda y predecible, el amor sigue siendo su asignatura pendiente... hasta que en su camino se cruza Jason Black, un hombre que desatará a su alrededor una tormenta de deseo.
Comentario:
Mira, conseguir que Justine deje de ser tan cínica y superficial me va a gustar, ahora que no sé yo si Jason es el mejor para eso. Sólo con ver la lista de cosas que pide para su habitación ya me entra un terrible dolor de cabeza, por dios: sábanas de lino, temperatura a 20ºC, 2 botellas de agua, 2 chupitos de vodka a las 9 en punto, que almohadones de plumas de ganso… Madre mía, es imposible que ser así sea saludable.

Bueno, siento decir que en parte siento que este libro no está a la altura de los otros tres. No es malo, Kleypas nunca es mala, pero este libro es mucho más típico, mucho más mundano. Mujer cínica que nunca se ha enamorado, pero que tampoco iba tirándose a cualquiera por ahí, conoce a un hombre guapo, controlador y seguro que dice no tener alma y que se la quiere tirar, pero que… quiere ir un poco despacio con ella porque sabe que no juegan en la misma Liga. Así que ella se enfada porque lo encuentra insultante, algo gracioso, porque si él hubiera ido a por ella desde un principio estaría enfadada por ser sólo un flipado que busca sexo. Entonces, es un poco, ¿Qué quieres realmente, si haga lo que haga te va a parecer mal? No sé, los otros libros eran como mucho más románticos, en un plano mucho más dulce, poco a poco y dónde el sexo es el final, mientras que en este no hay esa conexión, esa dulzura, esos momentos que te hacen sonreír.

Haceros un favor y pasar a otro, no lo leáis x)

Bueno, sinceramente, no concibo que una madre quiera lanzarle un maleficio a su hija para que nunca pierda a nadie como ella perdió a su marido, porque aunque en sí sea por un acto de bondad, la estás obligando a no poder querer nunca a nadie y así no poder experimentar la pérdida. Eso es una vida de vacío, agonía y frustración, en la que no sufres por la pérdida del amor, sino que sufres por el vacío y la ausencia de éste. Creo que eso es aún peor.

Tiene algunos momentos muy románticos y algunas frases realmente bonitas, pero esta historia sigue sin cuajar con las otras dos de la saga. Lo siento, no está a la altura, la magia y el amor que hay aquí es ínfimo, típico, no es un libro “Kleypas” en ningún sentido, y menos comparado con los otros tres de la saga. Además, todo el rollo japonés de las cuerdas, no me ha gustado nada, es como si ahora todas las autoras que me gustan tuvieran que meterse en eso… qué manía. Y luego con lo de la magia, rituales, el alma y todo eso… no le he visto el qué.
Un aprobado raso, no hay más. 

“Es un riesgo que estoy dispuesto a asumir. Esto ocurre una sola vez en la vida. Conoces a alguien y tienes esa extraña sensación, rozas su piel y es la mejor piel que has sentido jamás, y no hay perfume en el mundo capaz de superar su olor, y sabes que nunca te aburrirías con ella porque ella es interesante incluso cuando no hace nada. Incluso sin saberlo todo de ella, la quieres. Sabes quién es y a ti te funciona en todos los aspectos. — Los brazos de Jason se tensaron—. He pasado los últimos diez años estando con una persona equivocada detrás de otra, lo que me capacita para saber cuándo he encontrado a la mujer de mi vida. Tú también lo sientes. Sabes que estamos destinados a estar juntos.”

Esta cita es lo único realmente bonito del libro, me ha encantado.