Sólo para un caballero

Título: Sólo para un caballero
Autor: Sue Ellen Welfonder
Tipo: Novela romántica histórica
Saga: Mackenzie #3
Sinopsis:
Durante diez lujuriosos años, Robbie McKenzie ha saboreado los placeres sensuales de los que sólo puede disfrutar un hombre soltero. Único heredero del clan del Venado Negro, su reputación ha llegado hasta el último confín de Escocia, como guerrero... y como buen partido.
Pero la altiva Juliana Mackay no tiene el menor interés ni en su persona ni en su rango. Sólo quiere cumplir una promesa que le hizo a su madre en el lecho de muerte. Sin embargo, las cosas empezarán a cambiar cuando la joven recibe un golpe en la cabeza y, literalmente, cae en los brazos del apuesto caballero.
En la confusión del momento, estalla la pasión entre ambos... Por culpa del golpe, Juliana ha olvidado su identidad y su misión... aunque Robbie sabe muy bien que ha prometido casarse con una mujer de un clan rival.
Comentario: 
No me esperaba que esta también fuera una saga familiar, ahora que reconozco que tampoco es que me sorprenda en demasía, ni mucho menos. Ahora el protagonista de este libro no es otro que Robbie, el hijo de Duncan y su primera mujer, que en el primer libro Lillian acoge y cuida como si fuera suyo, y que siempre quiso. Un hermano mayor para las peques que luego tuvo la parejita.

Si soy sincera, éste libro me ha parecido mucho más normalito. No es que en sí no tenga gracia, porque el argumento está bien. Una chica que es bastarda y vive con su madre y su hermano, y su madre en el lecho de muerte le pide que vaya a ver a Duncan a devolverle un dinero que le dejó para morir en paz, con honor. Y en medio de todo este alboroto, ella conoce al hijo de Duncan –el que podría ser su primo- y se enamoran sin remedio. Además, Rob está prometido con una mujer que sólo quiere venganza y que está en el castillo para desgraciarlo, y tiene todo un plan trabado.

Un montón de intrigas, de problemas, personajes secundarios muy interesantes, un padre que no sabe lo que quiere, la visión de un drama doloroso, un amor de los que cuentan las leyendas… y por suerte, un bonito final con el que sacar una sonrisa. No es que no sea un buen libro, pero me parece mucho más mundano. No tiene nada que lo haga especial, ni ningún personaje que sea especialmente interesante. Además, reconozco que Rob y su palabrería diabética mataban muchas escenas. Tanto romanticismo rosa me sacaba un tanto de quicio, hubiera preferido algo más estilo su padre o su tío, que eran más brutotes y a la vez más cálidos, que no tanto ‘amor mío’. Las cosas como son.